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¿Alguna vez te has preguntado cómo se produce un rayo durante una tormenta eléctrica? Aquí te lo vamos a explicar de una manera muy sencilla.

¿Qué es un rayo? ⚡️

¿Alguna vez te ha sorprendido un calambre cuando has tocado a alguien o algo? Pues bien, acabas de experimentar un rayo en miniatura. Esto se produjo porque tú acumulaste cargas positivas o negativas y lo que tocaste tenía cargas del polo opuesto. Esto se llama separación de cargas y es el mismo fenómeno que produce los rayos y las tormentas eléctricas.

Separación de cargas 🌫️

Los potentes corrientes de aire ascendentes y descendentes transportan pequeñas gotas de agua y cristales de hielo a través de la tormenta, esto provoca que algunas partículas se vuelven positivas y otras negativas, separándose en diferentes áreas de la nube. Entonces se crea un campo eléctrico, que es como una fuerza invisible que quiere conectar las cargas positivas y negativas de nuevo (como en el ejemplo del calambre). Pero el aire entre ellas actúa como barrera hasta que las cargas acumulan una inmensa fuerza y pueden romperla.

Como se produce un rayo

¿Cómo baja el rayo a la tierra? 🌩️

El proceso a través del cual el rayo conecta el cielo con la tierra es fascinante. Un camino invisible para el ojo humano desciende de la nube con carga negativa. En respuesta, una «corriente ascendente» de carga positiva surge del suelo, intentando encontrarse con él. Cuando estas dos cargas se encuentran, ¡bam! Se produce un rayo, iluminando el cielo y transfiriendo enormes cantidades de energía eléctrica.

¿Cómo se produce el trueno? 💥

El trueno es el sonido poderoso y retumbante que sigue al brillante destello de un rayo. Originado por la expansión violenta y rápida del aire calentado por el rayo, el trueno es, en esencia, aire explotando. A medida que el aire se expande, se generan ondas sonoras potentes que resonan como un fuerte estallido o un retumbo a lo lejos.

Cuidado con los objetos altos y los rayos 🚫

Quizás te has dado cuenta de que los rayos a menudo golpean objetos altos como árboles o edificios. Esto es porque están más cerca de las nubes y es más fácil para el rayo llegar a ellos. Pero no siempre es así, los rayos también pueden golpear el suelo en lugares abiertos.